Lo que debes saber del tercer trimestre de embarazo

Editorial Farmatodo.

Contenido posible gracias a:


En el tercer trimestre del embarazo, que abarca desde la semana 28 hasta el parto, el bebé experimenta un rápido crecimiento y desarrollo, alcanzando un tamaño considerable antes de su nacimiento. Durante este tiempo, la madre puede experimentar un aumento en la incomodidad física debido al crecimiento del útero, lo que puede provocar síntomas como acidez estomacal, dificultad para respirar y presión en la pelvis. Además, las visitas prenatales se vuelven más frecuentes para monitorear de cerca la salud de la madre y el bebé, incluida la verificación de la posición fetal y la evaluación del crecimiento del bebé.

El tercer trimestre también es un momento crucial para la preparación para el parto, incluida la creación de un plan de parto, la asistencia a clases prenatales y la organización de los preparativos para el parto y el cuidado del recién nacido. A continuación, conocerás en profundidad más detalles sobre estos últimos meses de embarazo:

  • Desarrollo fetal

Durante el tercer trimestre del embarazo, el desarrollo fetal se caracteriza por un rápido crecimiento y maduración de los órganos y sistemas del bebé en desarrollo. En esta etapa, el feto alcanza un tamaño considerable y comienza a acumular grasa subcutánea, lo que le ayuda a regular su temperatura corporal después del nacimiento. Los sistemas respiratorio y circulatorio continúan madurando, y el bebé practica la respiración al mover el diafragma y el pecho, preparándose para la vida fuera del útero. Los órganos sensoriales, como los ojos y los oídos, continúan desarrollándose, y el feto puede responder a estímulos externos, como la luz y el sonido. Además, el bebé sigue creciendo en peso y longitud, y sus movimientos se vuelven más evidentes para la madre a medida que ocupa un espacio cada vez mayor en el útero.

  • Cambios en el cuerpo de la madre

Durante el tercer trimestre del embarazo, el cuerpo de la madre experimenta una serie de cambios significativos a medida que se prepara para el parto y el nacimiento del bebé. Entre estos cambios se incluyen el aumento del tamaño y la incomodidad debido al crecimiento del útero, lo que puede provocar síntomas como acidez estomacal, dificultad para respirar y presión en la pelvis. Además, es común que la madre experimente un aumento en el peso y la retención de líquidos, lo que puede causar hinchazón en las extremidades. A medida que el bebé crece y ocupa más espacio en el útero, es posible que la madre experimente más movimientos fetales, algunos de los cuales pueden ser bastante vigorosos. Asimismo, los cambios hormonales pueden afectar la piel y el cabello de la madre, provocando la aparición de manchas oscuras en la piel, estrías y cambios en la textura del cabello.

  • Exámenes y citas médicas regulares

Durante el tercer trimestre del embarazo, a medida que se acerca la fecha de parto, las citas médicas regulares son fundamentales para monitorear de cerca la salud de la madre y el bebé. Estas visitas prenatales suelen ser más frecuentes, generalmente cada dos o tres semanas al principio del tercer trimestre y luego semanalmente hacia el final. Durante estas citas, el médico realiza chequeos de rutina que pueden incluir la medición de la presión arterial, la evaluación del crecimiento fetal mediante ultrasonido, el control del ritmo cardíaco del bebé y la verificación de la posición fetal. Además, se pueden realizar pruebas adicionales, como análisis de sangre para detectar anemia o diabetes gestacional, y cultivos vaginales para detectar infecciones. Estas citas también brindan la oportunidad de discutir cualquier inquietud o pregunta que la madre pueda tener sobre el parto, la lactancia materna y los cuidados posparto.

  • Síntomas comunes

Durante el tercer trimestre del embarazo, es común experimentar una serie de síntomas que incluyen aumento del tamaño del útero con sensación de presión abdominal, acidez estomacal y reflujo, dificultad para respirar debido a la presión sobre los pulmones, aumento de la frecuencia urinaria debido a la presión sobre la vejiga, dolores de espalda, calambres en las piernas, hinchazón, fatiga, contracciones de Braxton Hicks y cambios emocionales. Estos síntomas son parte del proceso natural del embarazo y varían de una mujer a otra. Es importante comunicarse con el médico si se presentan síntomas preocupantes o cambios significativos en la salud durante este período.

  • Preparación para el parto

Durante el tercer trimestre del embarazo, la preparación para el parto se enfoca en varios aspectos clave para garantizar una experiencia lo más tranquila y segura posible. Esto incluye participar en clases de preparación para el parto donde se aprenden técnicas de respiración y posiciones útiles, así como obtener información sobre el proceso de parto y el cuidado del recién nacido. Además, es importante mantenerse físicamente activa con ejercicios suaves recomendados por el médico, asegurarse de descansar adecuadamente y abordar cualquier preocupación emocional a través de la comunicación con la pareja, familiares o profesionales de la salud mental si es necesario. Preparar un bolso para el hospital con elementos esenciales y familiarizarse con los procedimientos y opciones de atención médica también son pasos importantes en la preparación para el parto durante el tercer trimestre del embarazo.

  • Preparación para la lactancia materna

Durante el tercer trimestre del embarazo, la preparación para la lactancia materna es esencial para establecer una experiencia exitosa después del parto. Esto incluye educarse sobre los beneficios y técnicas de la lactancia, cuidar los pezones mediante masajes suaves y evitar jabones fuertes, adquirir artículos de lactancia como sujetadores y almohadillas absorbentes, comunicarse con el equipo de atención médica sobre tus planes y preocupaciones, buscar apoyo emocional de tu pareja y seres queridos, y mantener una dieta saludable y un estilo de vida activo para preparar tu cuerpo para las demandas físicas de la lactancia. Esta preparación te ayudará a sentirte más confiada y preparada para amamantar a tu bebé cuando llegue el momento.

  • Apoyo emocional

El tercer trimestre puede ser un momento emocionalmente desafiante a medida que te acercas al parto y te preparas para la llegada del bebé. Busca apoyo emocional de tu pareja, familiares, amigos y profesionales de la salud si te sientes abrumada o ansiosa.

Recuerda que cada embarazo es único y que es importante seguir las recomendaciones de tu médico para garantizar un embarazo saludable y un parto seguro. Si tienes alguna preocupación o pregunta durante el tercer trimestre, no dudes en comunicarte con tu profesional de la salud.

Conoce más productos, y agrégalos al carrito.

Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.

Preguntas Frecuentes


¿Es seguro hacer ejercicio durante el embarazo?

En general, el ejercicio moderado es seguro y beneficioso durante el embarazo. Sin embargo, es importante consultar con un médico antes de comenzar o continuar cualquier programa de ejercicios para garantizar la seguridad tanto para la madre como para el bebé.

¿Qué debo evitar durante el embarazo?

Durante el embarazo, se recomienda evitar el consumo de alcohol, tabaco y drogas recreativas, así como limitar la ingesta de cafeína. También es importante evitar ciertos alimentos como pescados de agua profunda con alto contenido de mercurio y quesos no pasteurizados.

¿Cuáles son los síntomas comunes en el tercer trimestre del embarazo?

Algunos síntomas comunes en el tercer trimestre incluyen aumento del tamaño del útero con sensación de presión abdominal, acidez estomacal, dificultad para respirar, aumento de la frecuencia urinaria, dolores de espalda, calambres en las piernas, hinchazón, fatiga y contracciones de Braxton Hicks.