Fatiga Muscular: Síntomas y Causas De La Fatiga

Editorial Farmatodo.

La fatiga muscular es una afección que te hace sentir cansado en cualquier momento del día. Por lo general, te da ganas de estar descansando o de dormir constantemente, por lo que puede interrumpir tu rutina diaria. Si eres una persona que practica deporte profesional o aficionado, o te gusta realizar actividad física con mucha frecuencia, es muy posible que llegues a padecer de este malestar. Es importante estar atentos al momento en que suceda, porque si no se la atiende debidamente puede llevarte a sufrir una lesión más incómoda.

Te invitamos a continuar leyendo esta guía para que sepas más sobre la fatiga muscular y toda la información que necesitas para conocer sus causas, prevenir este malestar o tratarlo adecuadamente en caso de que ya lo sufras. Además de eso, lo más recomendable es que estructures tu plan de entrenamiento con un profesional, para evitar generar sobrecargas musculares que puedan agravar la situación.

¿Qué es la fatiga muscular?

En palabras sencillas, la fatiga muscular es la ausencia absoluta o parcial de fuerza en el músculo para la realización normal de las actividades que se estén desarrollando. Esto pasa cuando el músculo pierde su fuerza, su capacidad para coordinar y puede generar pesadez y un incremento constante de nuestro ritmo cardíaco y el ritmo de la respiración.

Cuando realizamos alguna actividad física, especialmente aquellas de alta intensidad, nuestros músculos requieren de oxígeno y unas reservas energéticas llamadas glucógeno que activan las células del cuerpo. Al momento de elevar la intensidad y la carga de cualquier actividad física o deportiva que estemos realizando, la necesidad de oxígeno que tendrán los músculos será mucho mayor, lo que puede hacer que se sobrepase la capacidad del organismo para transportarlo.

¿Cuáles son las causas de la fatiga muscular?

Ante el esfuerzo extra para la distribución del oxígeno, el músculo que está realizando la actividad buscará una nueva fuente energética, lo que implica un aumento en el ácido láctico. Eso genera una acidosis metabólica, o la acumulación de ácido en el cuerpo, que puede descomponer las fibras de los músculos. Esto es el resultado de que la función motora se inhibe al momento de que el músculo llega a su límite de resistencia cuando se lo exige al máximo.

Algunas otras de las causas que producen la fatiga muscular son las siguientes:

• Problemas en la contracción y relajación del músculo: como consecuencia de una insuficiencia en los niveles de calcio en el cuerpo.
• Cuando el cuerpo acumula ácido láctico: este ácido sirve para transportar oxígeno desde los pulmones hasta otros órganos, generando energía. Sin embargo, cuando se presenta más líquido del normal, hay una descomposición de las fibras del músculo.
• Hidratación deficiente: cuando se pierde agua y electrolitos, el músculo es más vulnerable.
• Insuficiencia en el glucógeno: como te dijimos, esta sustancia es una reserva energética del cuerpo que, cuando no se encuentra en las cantidades necesarias, derivará en falta de fuerza y resistencia en tus músculos.
• Problemas de alimentación: se necesitan hábitos alimenticios que permitan tener en el cuerpo las suficientes cantidades de vitaminas, minerales e hidratos. En caso contrario, los músculos causarán problemas para su recuperación adecuada.
• No recuperar adecuadamente el cuerpo luego de realizar entrenamientos intensos genera que las cargas de los músculos sean mayores a lo necesario, lo que pone en riesgo su bienestar.
• Cuando se realiza un entrenamiento o actividad física más exigente de lo que el cuerpo puede resistir.
• Dormir mal no le permitirá al cuerpo tener el descanso y la recuperación debida para mantener los músculos en buen estado.
• Consumir alcohol y tabaco.
• Sufrir anemia.
• Tener problemas en la tiroides.
• Algunos medicamentos pueden implicar efectos secundarios que afecten a los músculos.

¿Cuáles son los síntomas de la fatiga muscular?

Los síntomas son muy notorios y suelen identificarse fácilmente luego de haber realizado actividad física exigente:

• Cansancio o fatiga.
• Respiración irregular.
• Dolor en articulaciones.
• Ritmo cardíaco aumentado.
• Pérdida de fuerza y falta de coordinación en la extremidad.
• Rigidez del músculo.
• Presión arterial alterada.

Tratamiento para la fatiga muscular

Contrario a otras afecciones, la fatiga muscular no requiere de una intervención médica o quirúrgica, a no ser que se convierta en alguna lesión de grados avanzados, caso en el cual deberás acudir a tu especialista de confianza. El tratamiento para este problema suele poder realizarse directamente por la persona afectada, haciendo uso de métodos domésticos que trabajen en los componentes físicos, nutricionales, entre otros. Puedes acudir a alguna de estas posibilidades:

• Aplicar un masaje terapéutico para disminuir cualquier inflamación que aparezca en el músculo.
• Darte baños alternando agua fría y agua caliente te ayudará a relajar el músculo y favorecer la recuperación, especialmente una vez hayas terminado de practicar la actividad física o deportiva. Estos baños minimizan el dolor.
• Utilizar medias de compresión para reducir la molestia muscular una vez se termine el ejercicio. Si se las utiliza mientras se realiza la actividad deportiva, estas medias ayudan a fortalecer la fuerza y el rendimiento.
• Hacer uso de una máscara con aire hipóxico para aumentar la capacidad de la frecuencia cardíaca.
• Darle a tu cuerpo un descanso de calidad para evitar la fatiga extrema. Dormir por lo menos ocho horas ayudará a que tu cuerpo esté en reposo y cumpla sus funciones con normalidad.
• Mejorar el consumo de nutrientes y la hidratación que aplicas en tu dieta.
• Elementos como las cremas corporales y suplementos con Vitamina D suelen ser muy útiles para los músculos.

Un aspecto importante a tener en cuenta es que el calentamiento y estiramiento debe realizarse tanto antes de hacer ejercicio como después, cuando hayas terminado tu rutina. Esto protegerá tus músculos de cualquier posible lesión o dolencia.

Alimentos y dietas útiles para evitar la fatiga

Algunos alimentos que puedes consumir y te ayudarán a prevenir la fatiga muscular son los siguientes:

• Aguacate, que ayuda a fortalecer el potasio en el cuerpo.
• Plátano, que también ayuda con el potasio y, además, agrega magnesio, que aporta a la relajación de los músculos.
• Nueces, que aportan proteína vegetal, zinc y fósforo.
• Huevos, que contienen vitamina B.
• Perejil, que brinda vitamina C y ácido fólico, rico en Vitamina B.
• Los cítricos son un gran aportante de vitamina C, que ayuda a los procesos antioxidantes en el cuerpo.

Además, para aliviar las dolencias y fatiga muscular puedes hacer usos de cremas o geles para masajes, así como de vitaminas y minerales que tienen múltiples beneficios para la salud en general y que se consiguen fácilmente en farmacia. Consulta con tu especialista para conocer las mejores opciones para tratar tu fatiga muscular, sobre todo si son muy constantes.