Sudor en las axilas, por qué se produce y cómo controlarlo

Editorial Farmatodo.

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El sudor es una función fisiológica natural que desempeña un papel crucial en la regulación de la temperatura corporal. Sin embargo, cuando se trata del sudor en las axilas, este fenómeno puede ir más allá de la función térmica, afectando la comodidad y confianza de quienes lo experimentan. En este artículo queremos contarte por qué se produce este fenómeno y cómo puedes controlarlo.

Causas del sudor en las axilas

La producción de sudor en las axilas es un proceso fisiológico que cumple muchas funciones en el cuerpo humano. Las glándulas sudoríparas juegan un papel clave para regular la temperatura corporal y eliminar toxinas. En el caso específico de las axilas, la sudoración es el resultado de la activación de dos tipos principales de glándulas sudoríparas: las eccrinas y las apocrinas.

  • Glándulas eccrinas: estas glándulas son las más abundantes en el cuerpo y están distribuidas en gran parte de la piel. Su función principal es regular la temperatura corporal mediante la liberación de un sudor claro y acuoso. La activación de las glándulas eccrinas en las axilas ocurre en respuesta al calor y al ejercicio.
  • Glándulas apocrinas: ubicadas principalmente en las áreas de vello, como las axilas y la región genital, las glándulas apocrinas se activan en situaciones de estrés, emociones intensas y cambios hormonales. A diferencia del sudor eccrino, el sudor apocrino es más espeso y contiene compuestos orgánicos que, al interactuar con las bacterias en la piel, pueden generar olores desagradables.

Factores desencadenantes de la sudoración en las axilas

  • Genética: La predisposición genética puede influir en la cantidad de glándulas sudoríparas y en la respuesta del cuerpo a los estímulos que desencadenan la sudoración.
  • Temperatura ambiente: el calor ambiental es un desencadenante común del sudor en las axilas, ya que el cuerpo busca regular su temperatura interna.
  • Actividad física: el ejercicio y la actividad física intensifican el sudor en las axilas para ayudar a enfriar el cuerpo.
  • Emociones y estrés: las situaciones de estrés y emociones intensas pueden activar las glándulas apocrinas, contribuyendo a que se presente sudor en las axilas.
  • Cambios hormonales: factores como la pubertad, el ciclo menstrual y la menopausia pueden afectar la producción de sudor en las axilas.

Efectos del sudor en las axilas

  • Olor fuerte: la presencia de glándulas apocrinas en las axilas, que se activan en situaciones de estrés y emociones intensas, puede contribuir al desarrollo de olores corporales característicos. La interacción del sudor apocrino con las bacterias en la piel es la responsable de estos olores.
  • Irritación en la piel: la acumulación de sudor en las axilas, combinada con la fricción de la ropa, puede generar condiciones propicias para la irritación cutánea y la proliferación de bacterias, lo que a veces resulta en molestias como la dermatitis.
  • Impacto en la autoestima: la sudoración excesiva en las axilas puede generar incomodidad física y preocupaciones estéticas, afectando la autoestima y la confianza de algunas personas.
  • Desarrollo de manchas en la ropa: el sudor, especialmente cuando se mezcla con antitranspirantes, puede generar manchas notorias en la ropa. Este efecto estético puede ser una preocupación para quienes buscan mantener su vestimenta en buen estado.
  • Impacto en la vida social y profesional: las personas que experimentan sudoración excesiva en las axilas pueden experimentar incomodidad social. La preocupación constante por el olor y las manchas de sudor suelen afectar la vida social y profesional.
  • Necesidad de productos específicos: para controlar el sudor en las axilas, muchas personas recurren al uso de antitranspirantes que contienen compuestos como el cloruro de aluminio. La necesidad de utilizar productos específicos para gestionar la sudoración puede ser una realidad para algunos.
  • Posibles alergias y sensibilidades: algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas o sensibilidad a los ingredientes presentes en los productos para el control del sudor.

Técnicas para controlar el sudor en las axilas:

Existen diferentes técnicas y enfoques que pueden ser efectivos para reducir la sudoración de las axilas y sus efectos secundarios. Además del uso de antitranspirantes, consideramos que estas son algunas técnicas que pueden ayudar a las personas con esta condición:

  • Cambios en la dieta: algunos alimentos, como los picantes y la cafeína, pueden estimular las glándulas sudoríparas. Reducir el consumo de estos alimentos contribuye en gran medida a controlar la sudoración.
  • Ropa transpirable: usar ropa hecha de telas transpirables, como algodón o tejidos que absorban la humedad, ayuda a mantener las axilas más secas y reducir la posibilidad de malos olores.
  • Prácticas para relajarse: la meditación, la respiración profunda y otras prácticas de relajación pueden ser útiles, ya que el estrés emocional puede desencadenar la sudoración. Enfocarse en el bienestar mental puede tener beneficios positivos en la regulación del sudor.
  • Toallitas refrescantes: cargar con toallitas refrescantes es muy útil para mantener la higiene de las axilas durante el día, especialmente en situaciones en las que no es posible una ducha.
  • Cambios en el estilo de vida: el sobrepeso puede contribuir a la sudoración excesiva. Tener un peso saludable, llevar una dieta equilibrada y hacer ejercicio de forma regular puede ser beneficioso.
  • Duchas regulares: mantén una buena higiene personal, incluyendo duchas regulares. Limpia las axilas con un jabón suave para eliminar las bacterias que pueden contribuir al mal olor.
  • Depilación: considera la depilación de las axilas. La presencia de vello puede aumentar la retención de calor y favorecer el crecimiento de bacterias, lo que contribuye al olor del sudor.
  • Mantén las axilas secas: asegúrate de que las axilas estén secas antes de aplicar antitranspirante. La humedad puede diluir la efectividad del producto.
  • Cambio de ropa: lleva ropa adicional contigo y realiza cambios cuando sea necesario, especialmente en climas cálidos.
  • Rutina de cuidado nocturno: aplica antitranspirante antes de acostarte. Esto permite que el producto tenga más tiempo para actuar y puede ofrecer una mayor protección durante el día siguiente.

Controlar el sudor en las axilas es una preocupación común, pero con la combinación adecuada de cuidados personales, elección de productos y, en algunos casos, asesoramiento profesional, es posible mitigar los efectos no deseados. Adoptar un enfoque integral hacia la higiene, la elección de productos y la atención a los desencadenantes individuales puede marcar la diferencia en la gestión del sudor axilar y mejorar la calidad de vida.

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Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.

Preguntas Frecuentes


¿Por qué se produce sudoración excesiva en las axilas?

La sudoración excesiva en las axilas, conocida como hiperhidrosis axilar, puede deberse a varios factores, como la genética, el estrés, la ansiedad, cambios hormonales, o incluso condiciones médicas subyacentes. Las glándulas sudoríparas en las axilas se activan en respuesta a estímulos térmicos o emocionales, produciendo sudor para regular la temperatura corporal.

¿La alimentación influye en la sudoración en las axilas?

Sí, algunos alimentos, como los picantes y la cafeína, pueden estimular las glándulas sudoríparas y contribuir a una mayor sudoración. Mantener una dieta equilibrada y moderar el consumo de estos alimentos puede ayudar a controlar la sudoración.

¿La depilación de las axilas influye en la sudoración?

Sí, la depilación de las axilas puede ayudar a reducir la retención de calor y minimizar el crecimiento bacteriano, lo que contribuye al olor del sudor. Sin embargo, la relación entre la depilación y la sudoración puede variar según la persona.