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El embarazo psicológico es una afección muy poco usual que puede afectar no solo a las mujeres, sino también a los hombres. Este presenta los principales síntomas de un embarazo y suele surgir cuando la persona tiene un alto deseo por concebir o se encuentra bajo un alto nivel de estrés por no querer estar embarazada.
El embarazo psicológico, pseudociesis, Síndrome de Rapunzel o embarazo utópico como también se le conoce, hace creer a la persona que se encuentra en gestación, aunque no lo esté. El desarrollo de los síntomas surgen por cambios hormonales reales, provocados por la mente. Esto se debe a que el cuerpo busca la forma de expresar las preocupaciones u obsesiones.
Para conocer cuáles son los síntomas y por qué se produce, te invitamos a que continúes leyendo.
Los síntomas de un embarazo psicológico resultan iguales a los de un embarazo real y normal. Aun no habiendo ninguna gestación las mujeres presentan:
Cada uno de los síntomas presentes se desarrollan porque el organismo comienza a producir hormonas del embarazo a causa de estímulos psicológicos. Cabe destacar que para diagnosticar que se trata de un embarazo psicológico, la persona debe ser evaluada por un especialista el cual debe realizar un ultrasonido abdominal o transvaginal.
Asimismo, en caso de iniciar con los síntomas y realizarse una prueba de embarazo de orina o sangre, estas arrojaran un resultado negativo. Sin embargo, para dar con la causa, el especialista puede recomendar la realización de exámenes hormonales, así como incluso una tomografía del cráneo para asegurarse y descartar alguna afección como prolactinoma.
El embarazo psicológico puede ser causado por diferentes motivos, aunque no existe una causa determinada, si se pueden destacar algunos factores comunes:
Miedo a quedar embarazada.
Deseo intenso u obsesión por quedar embarazada.
Dificultad para quedar en gestación.
Trastornos de depresión por infertilidad o esterilidad.
Trastorno somatomorfo.
Otra de las razones comunes es cuando existen problemas entre la pareja, es por ello que, ante cualquier situación, es necesario contar con ayuda psicológica tanto individual como terapia de pareja que ayude a solventar y equilibrar la relación.
Una vez que se confirma que los síntomas son por un embarazo psicológico se pueden realizar diferentes tratamientos de acuerdo a cada persona y lo que el especialista evalúe. De esta manera, los más comunes para tratar el embarazo psicológico son:
Existen casos, que, a pesar de ver los resultados negativos en las pruebas tanto de orina, como de sangre y ultrasonidos, las mujeres no dejan a un lado la idea de estar embarazadas. Por lo tanto, el especialista puede referir a que la persona se someta a terapias psicológicas.
El objetivo de estas es dar con la causa principal del embarazo psicológico y ayudar a la mujer a sobrellevar la situación. De esta manera, también se evita un cuadro depresivo por saber que realmente no está embarazada. Incluso, algunos casos también requieren de ayuda psiquiátrica.
Conocer el factor principal y aprender a superarlo o manejarlo, será vital para eliminar los síntomas del embarazo psicológico.
La ansiedad o deseo por estar en gestación es una de las principales razones por las que se produce el embarazo psicológico. Por lo tanto, disminuir o aprender a controlar este deseo intenso, ayudará a eliminar los síntomas.
Esto también se puede realizar con ayuda de un psicólogo, ya que muchas veces surge esta ansiedad por la presión de la familia, pareja o sociedad y no se cuenta con el apoyo de alguien para tratar el problema.
Además, existen diferentes métodos para disminuir la ansiedad, desde la medicina natural, ayuda de tés relajantes y calmantes. Así como con la práctica de algunos tipos de yoga y la meditación.
En aquellos casos donde ninguna de estas actividades funcione y se requiera de ayuda psiquiátrica, este especialista se encargará de proporcionar un tratamiento a base de medicamentos. Es importante que siempre sea bajo prescripción y supervisión médica y no automedicado.
Algunas mujeres que presentan infertilidad o menopausia precoz, suelen presentar embarazo psicológico, sobre todo por el gran deseo de poder tener un bebé. Dependiendo de cada persona y del especialista, se puede recurrir a exámenes y tratamientos que ayuden a solventar dichas situaciones de acuerdo al caso.
Generalmente, este tipo de tratamiento consiste en terapias que ayuden a reponer las hormonas faltantes para poder quedar en gestación.
En los casos en los que se presentan embarazos psicológicos por problemas hormonales, es importante realizar una serie de exámenes para determinar cuál es el mejor tratamiento o terapia hormonal para que no se produzcan dichos síntomas. Estos siempre deben ser establecidos por un especialista.
La terapia de pareja puede ser una gran alternativa cuando se presenta un embarazo psicológico y esta resulta ser la causa. Sin embargo, en la mayoría de los casos, se desarrolla por problemas de inseguridades, miedo al abandono o separación.
Esta angustia por no querer que la pareja termine la relación puede llevar a la persona a crear un embarazo psicológico, lo que, además, va a producir mayor ansiedad, baja autoestima e inseguridad y miedo. Cabe destacar que un embarazo no es símbolo de que una persona no desee irse, además, es importante establecer que no es motivo para mantener una relación.
Cabe destacar que existen algunas consideraciones o datos curiosos del embarazo psicológico, entre ellos destacan:
Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un
soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de
presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los
tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca
automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.
No existe un tiempo determinado, esto depende de cada mujer. Este puede ir de unas pocas semanas o meses hasta incluso cumplir los 9 meses y presentar dolores de parto, aunque no exista ningún feto.
No, esto varía de acuerdo a cada mujer, incluso como en el embarazo normal. Puede simplemente tener falta de menstruación, náuseas y crecimiento abdominal, mientras que otros casos sí pueden presentar una sintomatología más completa.
Generalmente se desarrolla porque el hombre siente mayor empatía y necesidad por proteger a su pareja durante un embarazo real. Por lo que requiere de acompañamiento psicológico.