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El dolor en los huesos es una enfermedad que ataca a muchas personas, en especial cuando hablamos del continente americano. Sin embargo, ¿cómo puedes evitarla y cuáles son los motivos de su desarrollo? En los siguientes párrafos vamos a profundizar en las causas, los síntomas, y otros aspectos relevantes que giran en torno a esta condición.
El dolor de los huesos se conoce por el nombre científico de “osteoporosis,” lo cual se traduce como “huesos porosos.” Se trata de una de las condiciones más comunes entre los adultos mayores (+65 años), y se produce debido a la carencia o nula producción de la vitamina D y el calcio. No obstante, existen factores genéticos y biológicos que pueden estimular el desarrollo de esta enfermedad, como, por ejemplo, la menopausia, el hipertiroidismo, o los antecedentes familiares. A pesar de esto, debes tener en cuenta que, por sí sola, no produce dolor. Este se genera tras experimentar un colapso o una fractura en las vértebras.
Tenemos que aclarar que la osteoporosis vuelve tus huesos más débiles, frágiles, y delgados. En consecuencia, no podrás realizar mucho esfuerzo y te sentirás con debilidad. Esto también aumenta el riesgo de que padezcas de lesiones óseas. Ahora bien, ¿quién es más propenso a padecerlo? Según los estudios realizados por la IOF (Fundación Internacional de Osteoporosis, traducido al español) una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres mayores de 50 años experimentan en la actualidad una fractura debido a esta enfermedad.
La mayoría de las ocasiones la osteoporosis no presenta síntomas, motivo por el cual la catalogan una “enfermedad silenciosa.” Entonces, ¿cómo puedes identificarla y contrarrestarla antes de que empeore? Las pocas veces que muestra una anomalía se presenta de la siguiente forma:
En lo que respecta a su tratamiento, los resultados se magnifican cuando se detecta con tiempo, esta es la razón de que sea de vida o muerte visitar al especialista una vez alcanzada la edad de 50 años. El médico te va a tratar con fármacos y con drogas capaces de ralentizar la pérdida ósea; también te brindará recomendaciones para ayudar a fortalecer tus huesos. ¿Cuáles son las más comunes? Por lo general se inclina hacia el cambio de tu dieta, la realización de ejercicios, y el consumo de suplementos nutricionales.
En los siguientes párrafos te comentaremos qué puede desencadenar el dolor en los huesos a largo plazo:
Se trata de una ruptura completa o parcial de tu hueso, mejor conocida como “fractura.” Dicha situación tiene distintos grados de complicaciones, los cuales dependen de la fuerza y del tipo de lesión. ¿Qué queremos decir con esto? Tus huesos se pueden fracturar de diversas formas, entre ellas enlistamos:
De acuerdo con la AAOS (Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos, traducido al español), las tres razones de que una persona experimente fracturas de este calibre son:
También debemos señalar los síntomas de una fractura, los cuales son:
En este caso el especialista tendrá que realizar una radiografía para verificar que el hueso esté roto. Si se confirma, debe recurrir a la inmovilización con yeso, bien sea con fibra de vidrio o yeso común. ¿Por qué emplearlo? Facilita al hueso sanar, siendo más preciso en la reconstrucción. Lo malo es que puede tardar más de 15 días. En diversos casos duran casi medio año. No obstante, en el peor escenario deberás recurrir a la cirugía invasiva con el fin de ajustar los fragmentos de tus huesos.
El cáncer de hueso se divide en variadas clases, como, por ejemplo, aquellos que se desarrollan alrededor de los huesos, en los tejidos, o en las células de éstos. Aquí se incluye:
Según la ACS (Sociedad Americana Contra el Cáncer, traducido al español) las enfermedades como el osteosarcoma son comunes en las personas jóvenes, entre los 10-30 años de edad. Considerando que los casos donde se ha presentado en personas mayores de 60 años abarca el 10% en su totalidad. Esto quiere decir que el cáncer de hueso, independiente del tipo, es anormal que se desarrolle en la vejez.
Y en caso de que esto suceda, es probable que se deba a enfermedades hereditarias. Sin embargo, también se debe a variados tratamientos o medicamentos, como, por ejemplo, una radioterapia o los medicamentos contra Paget (otra condición ósea, menos frecuente). Llegado a este punto, caben destacar los síntomas del cáncer:
Debes tener en cuenta que la principal recomendación de los especialistas es
extirpar el tumor por completo; sin embargo, algunos tipos de cáncer requieren una combinación de terapia dirigida o enfocada, radicación, quimioterapia, y más. Por otro lado, no olvides que el diagnostico veloz es uno de los factores que favorece los resultados del tratamiento, considerando que no se le brinda la autoridad y el tiempo a la enfermedad de establecerse. Esto es todo lo que necesitas saber respecto al dolor en los huesos.
Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un
soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de
presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los
tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca
automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.
El dolor en los huesos puede deberse a la carencia o nula producción de la vitamina D y el calcio, esto como consecuencia de una enfermedad muy común llamada Osteoporosis, que es muy frecuente en personas mayores de 65 años.
El dolor en los huesos causado por la osteoporosis puede estar acompañado de los siguientes síntomas, dolor constante en la espalda, perdida de postura o altura y puede ocasionar lesiones óseas fácilmente.
El dolor prolongado en los huesos producto de la osteoporosis puede desencadenar en lesiones óseas leves o fracturas completas o en cáncer de hueso. Por lo que siempre es indispensable contar con el acompañamiento de un profesional de la salud que te de un diagnostico y tratamiento eficaz.