Cólico Estomacal - Tratamientos Para Cólicos Estomacales

Editorial Farmatodo.

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Los cólicos estomacales son cada vez más frecuentes debido al estrés, a desbalances en la dieta y otras variaciones típicas del estilo de vida actual. Pero, ¿qué es un cólico? El cólico es un dolor del tipo pulsátil, que se caracteriza por tener una intensidad variable y con sensación oscilante (aparece, aumenta, disminuye y desaparece). Se origina por la contracción intensa del músculo liso de los órganos abdominales.

Si bien el estómago es el órgano que tendemos a asociar a los cólicos, no es el único desde donde se puede originar este doloroso malestar. Sigue leyendo para tener una mayor comprensión sobre cómo se producen, si existen otros tipos de cólico, cuáles tratamientos se encuentran disponibles y cómo prevenir esta dolencia.

Cólico estomacal – Principales causas

El cólico generado desde el estómago, se manifiesta por la distensión severa del órgano, debido a un acúmulo excesivo de gases (meteorismo). La razón por la cual se acumulan estos y se vuelve tan difícil eliminarlos por medio del eructo, es que los líquidos estomacales tienen cierta viscosidad que atrapa el gas, tal cual como sucede cuando se forman burbujas de jabón y esto dificulta la expulsión de los mismos.

Esta distensión es propiciada también por la ingesta copiosa de alimentos o por el consumo desmesurado de líquidos (potomanía). La presión interna que este contenido ejerce, causa un estímulo lascivo directo en las paredes estomacales y el tejido nervioso continuo, lo que ocasiona una contracción del músculo liso de las paredes del estómago, originando el dolor característico del cólico.

Otras causas de cólicos

Aunque los cólicos estomacales son los de mayor presentación en la vida diaria, este término se usa para hacer referencia a todo cólico que se percibe entre el pecho y la ingle (región estomacal o vientre), originándose así desde cualquiera de los órganos dentro de la cavidad abdominal.

El resto de los tejidos que ocupan este espacio pueden sufrir condiciones que desencadenan este tipo de dolencia. Órganos como los riñones, el útero y la vesícula biliar se relacionan a cólicos de índole diferente. Los calambres asociados a los riñones y a la vesícula biliar tienen correlación con la presencia de cálculos en esas estructuras y al proceso inflamatorio que estas piedras producen en ellos.

El mecanismo de aparición del cólico menstrual, por su lado, se asocia con una contracción de la musculatura uterina causada por la acción hormonal de las prostaglandinas, hormonas que colaboran en la expulsión mecánica de sangre del periodo menstrual.

Cólicos estomacales en bebés

Los cólicos estomacales se presentan debido a que el recién nacido está en pleno desarrollo y maduración de su tracto gastrointestinal a medida que asimila los nuevos alimentos que recibe, proceso que es muy diferente al tipo de nutrición que recibían desde la madre a través de la placenta.

El uso de biberones también ha propiciado la aparición de cólicos. Causan la ingestión de aire mientras éste mama del chupón, y este aire se acumula en el estómago e intestino causando dolor.

Tratamiento

Para aliviar este síntoma en los bebés, es indispensable provocar el eructo cada vez después de comer. Mantenerlo en posición vertical y darle palmaditas en la espalda es necesario, y mientras se tiene en esa posición conviene mecerlo para calmarlo. Los baños de agua tibia y masajes en la barriga, pueden ser útiles para aliviar los cólicos. El uso de medicamentos pediátricos para el control de estos debe ser prescritos por el especialista, después de revisar al bebé y descartar otros problemas de salud.

Prevención

Algunas sustancias en los alimentos que consume la madre pueden pasar al bebé a través de la leche materna y provocar los gases, como medida preventiva es mejor dejar de consumirlos mientras se está lactando. Sucede lo mismo con algunos componentes de las fórmulas lácteas, Si se sospecha que esta sea la causa, consulta con su pediatra para un cambio de fórmula.

Existen biberones diseñados para evitar la ingesta de aire, por lo que son un recurso valioso a considerar. Sin embargo, si los cólicos y el llanto del bebé no disminuyen pronto, es mejor no esperar más y acudir al especialista. Sobre todo, si los cólicos se acompañan de fiebre, vómitos y/o diarrea.

Cólicos estomacales en el adulto

El consumo de lácteos favorece la aparición de cólicos. El equilibrio en nuestro sistema digestivo (microbiota, enzimas, ácidos gástricos, etc.) va cambiando basándose en el tipo de alimentación que nuestro cuerpo requiere en cada etapa del desarrollo, por lo que el sistema digestivo de un bebé tolera la leche sin mayores inconvenientes.

Esto no es así en el adulto, ya que el sistema digestivo se ha adaptado a un tipo de alimentación diferente. Los componentes enzimáticos en esta etapa no son capaces de digerir la leche de forma correcta, y como consecuencia aparece el meteorismo.

Por otro lado, siguen existiendo alimentos no lácteos capaces de causar acúmulo de gases en virtud a la naturaleza de su composición. Los alimentos azufrados como el brócoli, cebolla y los frijoles, conllevan a la formación de flatulencias.

Tratamiento

Consulta con tu médico sobre los medicamentos disponibles para tratar los gases. Respetando las dosis recomendadas, estos fármacos modifican la viscosidad que atrapa el gas, rompiendo las burbujas formadas.

Los masajes circulares y el uso de compresas de agua tibia son un complemento útil para liberar gases y relajar los músculos abdominales.

Las infusiones también han sido utilizadas, y desde tiempos ancestrales, para ayudar a calmar los calambres, y producir la expulsión de los gases. La manzanilla, el hinojo, el anís estrellado y el boldo (orégano orejón) contienen propiedades convenientes para tratar este malestar. Se recomienda prepararlos en agua tibia, sin hervir, durante 15 minutos y luego consumirlos.

Prevención

Consumir las cantidades necesarias de alimentos y líquidos, masticando correctamente los alimentos, hará una gran diferencia en el control de la aparición de cólicos estomacales. Si los gases aparecen después de masticar chicle, es preferible evitar este hábito.

Por otro lado, para tener conocimiento sobre el tipo de dieta ideal para ti, la opción será acudir con un especialista en nutrición. En el proceso se pueden descartar otras enfermedades que requieran de un tratamiento más complejo, como sucede con enfermedades parasitarias o infecciosas.

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Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.

Preguntas Frecuentes


¿Los cálculos renales generan cólicos estomacales?

Sí, entre los principales factores de riesgo de generar cólico abdominal se encuentran los cálculos renales, así como los biliares. Sin embargo, las causas de esta molestia pueden llegar a ser muchas.

¿Si tengo dolor abdominal cuándo debo acudir a un médico?

Lo ideal es acudir a un especialista en caso de presentar un dolor fuerte y constante. Asimismo, si no puedes evacuar las heces o existe presencia de sangre incluso en vómito, si existe fiebre, dificultad para respirar, dolor de cuello, tórax y hombro. Si bien los síntomas pueden ser más, es importante acudir de inmediato al médico cuando los malestares van en aumento.

¿El cólico estomacal se puede prevenir?

Sí, en la mayoría de los casos se puede prevenir manteniendo una alimentación sana y balanceada en conjunto de ejercicios. El estilo de vida que lleves es clave para evitar diferentes afecciones.